22/2/17

Quisiera ver preso a Joaquín Villalobos

Quisiera ver preso a Joaquín Villalobos

Sé que se oye fuerte este título pero por honor a la justicia me gustaría ver tras las rejas a este señor. No por ser apátrida, no por aprovecharse de tanta gente que le dio su confianza en el departamento de Morazán durante la guerra, pero sí me gustaría ver cómo responde ante un tribunal por el asesinato de nuestro poeta y literato Roque Dalton.

No me interesa si se cambió de bando, no me interesan sus principios o su ideología, ni lo que escribe; sé que tiene buena pluma, bien por él. Es más, hasta lo felicito por saber defender sus ideas tan arrecho, todos tenemos derecho a ser tal cual queramos, cómo pensar y cómo conducirnos, al ex comandante no le cuestiono como asumió el proceso de post guerra; aun cuando no esté de acuerdo con él, se le respeta. Lo que me parece inaceptable es su cobardía ante el caso Dalton.

Incluso, una tarde hablando con Juan José (hijo del poeta), me afirmó que a nivel público Villalobos ha aceptado su autoría a través de diferentes entrevistas que le han realizado. Desde 1975 han pasado 41 años del magnicidio de Roque Dalton, y a estas alturas aun no se conoce la verdad, aun no ha sido juzgado Villalobos, gracias a artilugios jurídicos amorales.

A la familia Dalton le responden diciéndole que es un caso prescrito, que no es de lesa humanidad este homicidio, que el documento “De la Locura a la Esperanza” de la Comisión de la Verdad (de la ONU) no lo abordó porque no fue durante los años de la guerra abierta, en los 80. Ha llegado tanto el cinismo institucional que ni los mismos gobiernos de izquierda levantan polvo por este caso.

Por eso me gustaría saber qué explicación da ante un Juez Joaquín Villalobos, para conocer la verdad de la muerte de Roque y poder tener un lugar donde mostrar mis respetos a sus restos, es tan cobarde este señor (y otros fulanos que andan por ahí) que ni siquiera quieren decir dónde está su cuerpo. Villalobos es tan falso como la institucionalidad con que se escuda para ocultar la verdad.

No quiero una explicación en medios de comunicación, tampoco a través de un libro como dice Jorge Meléndez que lo hará (otro de los involucrados en este caso), y mucho menos quiero explicaciones de terceros; lo justo es que Villalobos comparezca ante un tribunal, con un juez, con un jurado, y por supuesto que tenga defensa y que comparezcan de igual forma los ofendidos. Por cierto, deberíamos aprovechar que el ex comandante aun está vivito y coleando, y promovamos la justicia, nacional e internacional.

El caso Dalton no solo compete a la familia Dalton. él nos deja a los salvadoreños y al mundo un legado literario, académico, político, de mucha calidad; por lo tanto su memoria es un patrimonio cultural de la humanidad. Su obra nos obliga a esforzarnos para conocer la verdad de los acontecimientos que giraron alrededor de su muerte, y a saber de igual forma dónde están sus restos.

Es inaceptable que las instituciones salvadoreñas se nieguen a tomar cartas en el asunto, y a la vez fomentar en vano su memoria asumiendo demencia ante el principio del derecho humano universal: conocer la verdad, e impedir que la familia Dalton y la gente en general pueda tener un lugar donde mostrar los respetos a Roque.

Los chilenos pueden ir a la tumba de Neruda, los colombianos tienen un lugar donde rendir tributo espiritual al Gabo, los cubanos de igual forma a Martí, los estadounidenses a Poe, los españoles a Cervantes, y así cada pueblo con su referente literario; pero no lo puedo hacer yo, tampoco la familia Dalton. Joaquín Villalobos y otros sí saben dónde están los restos de Roque y no lo quieren decir aun gozando de sus facultades, por esa razón precisa me gustaría verlos presos, por evasores de la verdad y la justicia.


Imagen cortesía de Otto Meza

 PD: Ojala le hagan llegar este escrito al ex comandante para que sepa de antemano que si acaso decide llevarse este secreto a la tumba, se asegure mejor que su osamenta también sea en un sitio escondido, pues de seguro muchos querrán llegar a defecar a ese lugar a su memoria, no por apátrida o traidor, pero sí por cobarde e irrespetuoso a la humanidad, por secuestrar y cercenar a la salvadoreñidad una parte de su identidad.



http://maxherrador.com/


http://maxherrador.com/estructura-narrativa-ajillo/