San Romero de América en mi Corazón.
Foto y Texto: Max Herrador
Me cuestionaba una muchacha en tono camorrero, ustedes los “comunistas”
no dejan en paz al pobre monseñor Romero que ya ratos hubiese canonizado la
iglesia si no lo tomaran como símbolo político electoral.
Hice entonces la siguiente reflexión: Somos de izquierda o de derecha, a eso
se resumen nuestras creencias colectivas como si fuesen los ideales dos equipos antagónicos,
“Barça o Real”, “Boca o River”... Mejor propongo que seamos humanistas, veamos más
allá del mismo dogma cristiano y aprendamos de este cura Romero que dejó de ser
un conservador confeso y se transformó creyendo, sí, que los pobres deben de
tener voz ante tanta injusticia, creyendo que la vida y la dignidad es un
derecho inalienable de la condición humana, por eso su asesinato es la sombra
de tanto inocente que murió en esa guerra injusta como la pobre decisión del
vencedor vencido por su mismo plomo calibre 22.
Continúo reflexionando: Romero no necesita una canonización, él ya es un
santo. No necesitamos los que creemos en su legado la reafirmación de ninguna institución,
ya sabemos que dio su vida por los pobres. Por lo tanto si acaso lo canonizara
la iglesia sería irrelevante ponerse a pensar que el máximo líder del partido
ARENA fuese su asesino, el Mayor Roberto D`aubuisson al igual que Poncio
Pilatos y Caifás solo cumplían su papel en la historia y nada más.
