15/3/13

Vida Estudiantil


Vida Estudiantil


Los estudiantes organizados en la mayoría de sociedades se han constituido como un movimiento social.

Y como tal sus proyecciones siempre van encaminadas a razones sociales, por ejemplo, mejorar las condiciones de estudio en calidad y cantidad, los niveles de empleo y  calidad de vida, representan la conciencia social de los jóvenes criticando sin miedo la realidad.

La naturaleza académica y joven de este movimiento lo ha caracterizado a lo largo de los años por ser dinámico y controversial, reivindicativo y a lo largo de la historia se desborda hacia la violencia entre el Estado y la sociedad civil.

En el país la Universidad de El Salvador es la única institución de educación superior que acepta abiertamente y legalmente la organización estudiantil, tanto que los estudiantes forman parte de un 33 % de las estructuras administrativas y legislativas de la institución, según su propia Ley Orgánica.

Desgraciadamente esta representatividad y poder de organización es invisible para la misma opinión pública, los tradicionales medios de comunicación se encargan de ello.

Muy poco conocemos del movimiento estudiantil y lo poco que sabemos es a partir de las malas referencias que se esfuerzan en destacar los señores directores y editores de los antes mencionados.

La organización estudiantil es buena y necesaria en toda sociedad, pero en nuestro caso este movimiento se mantiene “hibernando” gracias a las fuerzas políticas hegemónicas que lo ven como potencial punto crítico, por la capacidad que representan los estudiantes vemos dos escenarios: Primero, la izquierda lo suele utilizar  en su ajedrez político usurpando muchas veces la autonomía de las asociaciones estudiantiles y peor aun el pensamiento joven.

Por otra parte la derecha constantemente lo denigra a través de sus voceros oficiales y no oficiales. Injustamente no se dice que los estudiantes se organizan para ayudar a las emergencias nacionales, terremotos, inundaciones, lucha contra el dengue y otros. Los estudiantes se organizan también para actividades varias, ecológicas, deportivas, de género, y porque no, ideológicas y gremiales. Por eso la universidad se llama así; por universal, valga la redundancia.

Sabían que sin los votos de los estudiantes en el Consejo Superior Universitario,en la Asamblea General Universitaria y en las Juntas Directivas de las facultades la Universidad fuera legalmente ingobernable. Proyectos como la Villa Olímpica Centroamericana y del Caribe en el 2001 jamás hubiese sido posible, ya que fue necesaria la aprobación de los estudiantes  para la autorización de dicho proyecto y así muchos otros.

La estructura jurídica de la UES está diseñada para que la institución incluya en toda proyección administrativa, legislativa y académica al estudiante, no podría funcionar la universidad por falta de "Quórum" en los órganos colegiados de gobierno universitario y esto nunca ha sucedido aun cuando la AGEUS y otras asociaciones de facultad y carreras están desarticuladas.


AGEUS

La Asociación General de Estudiantes Universitarios Salvadoreños, representa la cúpula del movimiento estudiantil pero hace más de 10 años ésta dejó de funcionar institucionalmente, gracias a los dogmas, a las malas intenciones y las ambiciones personales de líderes que veían a la asociación estudiantil como un trampolín a sus proyecciones políticas.

Actualmente el movimiento social estudiantil parece tener claridad en sus objetivos, los estudiantes organizados en los mismos órganos de gobierno expresan querer pertenecer a una sociedad civil crítica y no a una militancia que reciba “línea” de un partido, su transformación está lista sin desvirtuar su carácter revolucionario.

Desde la Asamblea General Universitaria se están preparando los cimientos legales para el resurgimiento de la AGEUS, de carácter federativo, estructurada por las facultades que componen la misma UES, es decir, vinculando su consejo ejecutivo a las 12 asociaciones estudiantiles de cada facultad.

Espero lleguen a feliz término, no es la primera generación de jóvenes que quieren hacerlo ya han surgido otros fracasos, pero como me dijo un “cipote” organizado de medicina,  -“de los fracasos se aprende”.

AUNQUE LOS TIREN AL RÍO EN LA ESPUMA HAN DE VOLVER.