18/9/19

101 días y más

101 días y más
Análisis político de los albores del gobierno de Bukele

A mí en lo personal no me cabe duda que el hecho que el joven millennial haya ganado las elecciones y sea hoy en día el primer ciudadano de la república es bueno, es lo mejor que le pudiese haber sucedido a este paisito, que corre con una desdicha histórica de dolores y lamentos, que como bien decía Monseñor Romero, suben hasta el cielo en forma tumultuosa.

Romper con las satrapías de ARENA y el FMLN era justo y necesario, al igual que la instalación de la CICIES como un órgano contralor de corte internacional colegiado, son buenos y nuevos escenarios que abren horizontes esperanzadores.

Sin embargo, nuestro joven presidente ya da signos de arrogancia, pedantería y prepotencia, generando un sospechoso malestar a quienes ya sabemos y conocemos los procederes conductuales de los presidentes debutantes de las repúblicas bananeras.


Les comparto entonces el análisis: 

Como primer punto a destacar es que el joven Bukele ganó con creces gracias a un buen márquetin político prometiendo en resumidas cuentas combatir la corrupción y la criminalidad, por lo que en estos primeros 100 días ya dio muestras que va sobre esa ruta.

La instalación de la CICIES y desmarcarse de los dos partidos que tanto daño le hicieron al país (ARENA y FMLN), junto a un gabinete de rostros nuevos y frescos, hace que la ciudadanía y la comunidad internacional lo vean con optimismo y confianza, factores indispensables para la reactivación económica desde la micro hasta la gran empresa.

Desde que se anunció hace año y medio sus intenciones para ser presidente, se hizo acompañar desde inicios de su campaña proselitista con sectores y actores claves como parte de su estrategia, entre ellos: salvadoreños en el exterior, intelectuales y profesionales independientes, pero también con algunos personajes oscuros de dudosa reputación, así como un ejército de troles.

En lo personal coincido con las palabras de óscar Picardo (director del instituto de ciencias de la Universidad Francisco Gavidia UFG) cuando califica al mandatario: “como autoritario y cool a la vez”, agregando que, “es un político hábil pero que también tiene un lado débil”.

En el sondeo de opinión recién difundido por la UFG se califica al Nayib Bukele con una nota de 8.54 (sobre 10) y en la publicada por La Prensa Gráfica le dan una nota arriba del 9, siendo números más que impresionantes que marcan un inicio presidencial con el pie derecho. 

El reto al parecer será mantener esa calificación pues recuerdo que hace 10 años el ahora prófugo Mauricio Funes también sorprendió con una excelente imagen al inicio de su gestión, tanto nacional como internacional.


Por otro lado siempre La Prensa Gráfica publicó el pasado 2 de septiembre que el partido Nuevas Ideas NI ya lidera con 32% las intenciones de voto para las próximas elecciones para alcaldías y parlamento; mientras que ARENA obtiene un 9%, el FLNM 5% y GANA 3%, respectivamente. Pero a su vez se mantiene el siempre incómodo 44% como la mayoría que no vota por nadie.

Al final no puedo dejar a un lado del análisis dos incidentes al cierre de los 100 días de gestión de Bukele, que son: el arresto del asesor de seguridad del nuevo gobierno Alejandro Muyshondt por violencia contra dos mujeres, madre e hija; y el otro incidente no menos significativo fue el impedir el acceso a dos periódicos digitales a una conferencia de prensa en Casa Presidencial.

El primer caso al parecer no tiene mayor trascendencia, pero sé que cada quien se hace esta pregunta tácita: ¿Qué tanto le debe el nuevo presidente a un oprobio como Alejandro Muyshondt como para que no sea removido del gobierno?

Y el segundo fue el sonado hecho que llegó a convertirse en acontecimiento, tanto, que disparó las alarmas a nivel internacional, pronunciándose en contra de la conducta de Nayib Bukele la ONU y la OEA, mismas organizaciones que le ofrecen el apoyo y asistencia para la instalación de la CICIES. Por eso no fue de extrañar que a los pocos días los periodistas “incómodos” se les permitiera hacer las preguntas que quisiesen.

En conclusión pienso que el país camina por mejor rumbo que hace un año, veo que la gente si bien es cierto tiene buena impresión del joven presidente calificándole de forma notable, también no termina de creerse todo lo que dice su aparato comunicativo, el cual a todas luces es oscuro y engañoso, de lo contrario no existiría ese 44% de gente que no votaría por su partido, ni por ningún otro porque aun creen que es más de lo mismo.

Cuando Bukele le respondió al “fastidioso” periodista las preguntas que no les habían permitido hacer lo hizo de una forma arrogante y pedante denotando su personalidad lisa, sin embargo, lo que no calculó el joven mandatario es que en realidad no le estaba respondiendo a un periodista molestoso e incómodo, le respondía más bien a ese gran segmento de la población aun escéptica, quienes no se convencen si es conveniente o no, que una sola persona tenga control total de los otros poderes del Estado.

Hay otros temas que me gustaría tratar más a fondo sobre el sector salud, medioambiente, educación y cultura; sin duda lo haremos más adelante y luego se los comparto.

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